El hecho de ser una ciudad autónoma española en África, cuya frontera más extensa es con Marruecos, da una idea de su eclecticismo y su riqueza cultural.
1. Ciudad Vieja de Melilla
Al hacer turismo en Melilla, es de visita obligada. Se trata de una ciudadela amurallada que, con sus 2000 metros de longitud, está entre las mayores de España.
Fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en los años 50 y, erigida sobre un peñón sobre el agua, alberga recintos fortificados y fosos.
2. Zona centro
Melilla tiene la mayor representación de arquitectura modernista del continente africano. De hecho, hay más de 500 edificios catalogados como tal. En España, solo Barcelona tiene más.
Muchos de estos edificios, que puedes ver en el Ensanche, llevan la firma de Enrique Nieto, discípulo del mismísmo Gaudí. Entre ellos, la sinagoga de Melilla, la Mezquita Central y otros edificios religiosos.
3. Plaza de España
Tu ruta modernista por el Ensanche puede comenzar o terminar en la Plaza de España, la más importante de al ciudad y la que separa los cascos antiguo y nuevo.
Si necesitas sentarte unos minutos, un lugar ideal para hacerlo es el Parque Hernández.
4. Playas de Melilla
Relajarse en las mediterráneas playas de Melilla en los meses de calor también resulta muy tentador. No te van a faltar opciones entre la playa de San Lorenzo, la de Los Cárabos, La Hípica…
5. Mercado Central
Quizás no te parezca uno de los imprescindibles que ver en Melilla, pero ya decimos que la ciudad autónoma es un encuentro de culturas. Y una manera de constatarlo es visitar este u otro mercado.
El turismo en la ciudad autónoma de Melilla, en definitiva, da para bastante más que para una escapada corta. Puedes comenzar por ahí, pero en las siguientes visitas querrás mimetizarte con el entorno más y más.