Acabaríamos antes si, en vez de preguntarnos qué ver en la comunidad de Castilla y León, nos planteáramos que NO ver. Porque tienes de todo: castillos y fortalezas, palacios, plazas monumentales, pueblos con mucha historia y patrimonio, enclaves naturales únicos, museos y centros de interpretación para jornadas muy didácticas...
Por si fuera poco, la comunidad es una oda constante a la buena gastronomía, y no te dejará que te vengas sin probarlo todo: desde el cocido Maragato al lechazo, el chuletón de Ávila o las galletas campurrianas.
Turismo en Castilla y León
La pregunta no es qué ver en Castilla y León, sino por dónde quieres empezar. No es porque sea la más extensa de España, que lo es, sino porque su patrimonio es infinito. Infinito.
Pero, como hay que acotarlo siquiera brevemente a fin de realizar la guía, vayamos provincia a provincia.
Ávila
Posiblemente, nunca verás murallas mejor conservadas. Pasea sobre ellas para obtener preciosas vistas y, si prefieres verlas desde otra perspectiva, ve al mirador de Los Cuatro Postes.
En la provincia te esperan Arévalo, Madrigal de las Altas Torres, El Barco de Ávila o Piedrahita. Sin dejarnos atrás su belleza natural, que es muy diversa.
Burgos
Pues sí, es el lugar en el que, probablemente, te comas la morcilla más rica. Y también donde verás una de las primeras catedrales góticas de España y buscarás a nuestros antepasados en Atapuerca.
En la provincia podrás saltar entre Orbaneja del Castillo y Santo Domingo de Silos, entre el Cañón del Río Lobos y el Desfiladero de la Yecla. Y son solo algunos ejemplos.
León
Si eres de los de "Yo en iglesias no entro", cometerás un error. Aquí no nos meteremos con tu fe, si es que profesas alguna, pero los más de 1.800 metros cuadrados de vidrieras de su Catedral merecen la visita.
Siempre puedes pasarte por Astorga, más aún si vas por el Camino Francés hasta Santiago de Compostela. En Riaño y en Las Médulas, en cambio, te fascinará lo que hace la naturaleza.
Palencia
¿Te suena "La Bella Desconocida"? Su catedral, sí. No es un reclamo, es que de verdad sorprende pese a la tosquedad de su aspecto exterior y a cómo la eclipsan otras de la comunidad.
Ampudias o Aguilar de Campoo son algunos de los pueblos que te esperan en la provincia, mientras que el embalse de Aguilar y la iglesia de los Santos Justo y Pastor, excavada en la roca, te permitirán respirar aire puro.
Salamanca
No creemos que su Catedral, la Casa de las Conchas o el Convento de San Esteban necesiten mucha presentación. En la provincia, un pueblo como La Alberca tampoco la necesita, pues ha conquistado a propios y extraños.
¿Que prefieres entornos naturales? Piérdete en el Huerto de Calixto y Melibea, en plena ciudad. O pasea por la Isla del Soto en Santa Marta de Tormes, o haz una ruta en el Parque Natural de Arribes del Duero.
Segovia
Si vas a Segovia para ver el acueducto, haces bien. Pero no te quedes solo con él, por fotogénico que resulte. El Palacio Real de la Granja de San Ildefonso, por ejemplo, no te dejará indiferente.
Tampoco lo hará Pedraza, al que también incluiríamos en una lista de aspirantes a pueblos más bonitos de España. Si quieres escaparte a donde solo se escuchan los pájaros, las Hoces del Río Riaza o las del Río Duratón son solo algunas opciones.
Soria
El yacimiento arqueológico de Numancia no solo es un enclave histórico, sino un símbolo de resistencia. Es momento de conectar con la historia.
Yanguas, Medinaceli o San Esteban de Gormaz te esperan en la provincia, igual que el Parque Natural del Cañón del Río Lobos.
Valladolid
Los fans del arte tienen una cita en el Museo Nacional de la Escultura, entre lo más importantes de Europa. Pero tan solo un paseo por la ciudad te permitirá percibir lo monumental que es.
Peñafiel también tiene mucha historia y patrimonio, mientras que a Laguna de Duero puedes poner rumbo si lo tuyo son las estampas naturales.
Zamora
Su catedral, el castillo o el Puente de Piedra presentan credenciales suficientes. Fluye por sus calles como el río Duero para dejarte seducir.
En Toro probarás buen vino y admirarás su patrimonio histórico, mientras que el Parque Natural del Lago de Sanabria y sierras de Segundera y de Porto ofrece un buen ejemplo de paraje natural de excepción.
Está muy pero que muy resumido, pero esperemos que sirva para hacerte una idea de lo mucho que el turismo en la comunidad autónoma de Castilla y León puede abarcar. ¡Cuanto antes empieces, mejor!